Un poco de mal gusto, pero no he encontrado nada más.
Pregunta: ¿ Si a mi me regalaran una Fugi GFX, que haría con ella ?
Respuesta: el ridículo.
Lo vi hace días en Photolari, y la verdad es que no hice mucho caso. Seguramente me vi reflejado en el espejo y me hizo un poco de daño, vamos, que metió el dedo en la llaga. Por otra parte es cosa más que sabida, así que no creo le den el Premio Nobel a Mango Street por su descubrimiento.
Hoy lo veo comentado por Hugo Rodríguez, y me animo a contarlo también aquí.
Es un experimento: un aficionado con una cámara muy chula y un profesional serio con una cámara de iniciación.
Hete aquí el resultado.
- Hoy lo veo en el Blog de Hugo Rodriguez
- Hace días lo vi en Photolari
- Pero la idea vino del canal Mango Street
Hay más respuestas que la que has dado. De hecho el ridículo, como respuesta es algo muy sintomático.
Por suerte, o desgracia, he podido ver trabajando innumerables veces a más de 20 fotógrafos distintos con los mismos elementos, misma localización, mismos props, etc…
Y ves, justo este tipo de cosas, como alguien es capaz de crear magia, más allá de factores tėcnicos, la capacidad de innovar, improvisar, crear algo diferente, estético, con mensaje… mientras otros parecen más preocupados por sus limitaciones tėcnicas y mentales…
De hecho basta con apuntarse a cualquier workshop o curso fotográfico, para experimentar esas sensaciones, para sentir esa envidia cochina por no haber sido tú, el que vió esa realidad para jugar con ella, hasta hacerla tuya.
He conocido autėnticos zoquetes, con mil defectos, que se han convertido en muy buenos fotógrafos. La receta: nada de miedo a cagarla, curiosidad por experimentar cualquier cosa y trabajar, trabajar y trabajar…
Trabajar hasta automatizar tus manos, tus gestos, anticipandote al resultado, donde en ocasiones ya no necesitas ni mirar que sale por la pantallita, por que es el viaje y no el vehículo lo que de verdad importa. Si hacemos todo esto, en realidad, ya no estamos trabajando, estaremos jugando… con la luz, las personas, los lugares y como no, con nuestra cámara.
Si tener la cámara que anhelas, es el detonante para hacer realidad todo lo dicho, la excusa, la motivación, el motor interno que te pone los pies en el suelo 4 horas antes que los demás… puede ser cualquier cosa, menos hacer el ridículo.
Abrazote, Adolfo… y saludos para la peña
Por cierto…Acepto propuestas económicas de Fuji, para vender GFX…jajajaja o lo que sea :p
Adolfo, dudo que hagas el ridículo con esa u otra cámara. Basta ver tus galerias para comprobar que el resultado sería más que digno.
Rídiculo es lo que haría uno de esos que se mete en la fotografía solo para aprenderse especificaciones de los catalogos de memoria y para el que fotografía no va más allá de fardar de camara y optica grande colgada al cuello. Cuanto mas grande, mejor.